Uno de los principales atractivos que tiene la Liga MX es que el campeón se determina por medio de una liguilla, es decir, después de toda la fase regular, los mejores se tienen que enfrentar una vez más para determinar quién será el campeón de la Primera División Mexicana, un sistema en donde André Jardine y el Club América se coronaron como monarcas absolutos el torneo anterior.



Las criticas que refiere la liguilla es que no se trata de un formato que sea justo con los que mantienen un ritmo regular, pues actualmente con el Play In, el décimo lugar de 18 todavía tiene aspiraciones de ser campeón y por más que esto difícilmente ocurre, no deja de ser un escenario cuestionable que pone la constancia como un aspecto completamente secundario. En una reciente entrevista, André Jardine fue puntual al mencionar que se debería premiar la regularidad, es decir, aquellos equipos que suman más unidades en todo el torneo son quienes deberían imponerse como campeones para que el mismo sistema de competencia ayudará al desarrollo del futbol mexicano.



Curiosamente el Play In, a pesar de poner a competir con posibilidades de campeonar al décimo clasificado de la tabla general, es también una forma justa para que el primer lugar, en este caso las Águilas, gocen de ventaja por su regularidad, ya que enfrentan a un equipo con una carga física de 180 minutos, así que por el momento parece ser una implementación que sí da beneficios a la constancia.






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