Entre los muchos cambios que se han dado en el América tras la salida de Miguel Herrera y el ingreso de Santiago Solar, resalta la suplencia absoluta de Federico Viñas en el equipo, pues con el argentino solamente ha iniciado dos partidos de siete posibles.







Sin contar su última lesión ante Pachuca y que no ha podido meter gol desde octubre del 2020, el nivel del ariete uruguayo está muy lejos de aquel que hizo soñar al americanismo con tener un nuevo ídolo romperedes y eso se refleja con sus pocas oportunidades para ser titular.







No es una cuestión de gustos por parte de Solari ni tiene mala relación con él. Eso tiene pinta de falso rumor a kilómetros de distancia, pues así como solamente ha sido titular dos veces en lo que va de torneo, hasta el juego contra el Atlas, Viñas había jugado todos los partidos por lo menos un par de minutos. Borrado no está y el objetivo de Santiago está en recuperar su nivel.



Aquí es cuando Viñas debe demostrar que tiene la calidad de ser un jugador del América, pues en este club se tiene que demostrar todos los días que tienes el derecho de portar la camiseta azulcrema. Tiene calidad y juventud, por lo que es una obligación para él recuperar ese nivel que le hizo ganar su primer gran contrato profesional.



Con apenas 22 años, Federico está en el momento ideal para forjar su carácter. Tiene a su lado a un maestro para tratar futuras promesas como Santiago Solari, y a partir de ahora solo le queda remontar un mal momento goleador. Mientras tanto, la afición deberá ser paciente, dejarlo trabajar y darle el crédito que se ha ganado con base en goles importantes.





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